El emblemático cantante congolés Papa Wemba falleció este domingo en plena actuación en el Festival de Músicas Urbanas de Anoumabo (FEMUA), en Abiyán, Costa de Marfil, por causas que todavía se desconocen, informaron medios locales. Las primeras hipótesis apuntan a la malaria cerebral que sufría, que ya lo mantuvo varios días hospitalizado en un centro de París el pasado mes de febrero y que le obligó a suspender varios conciertos, según confirmó su entorno.
Conocido como el rey de la rumba congolesa, Papa Wemba y su orquesta eran uno de los platos fuertes del festival y su muerte ha causado una gran conmoción, sobre todo entre sus colaboradores más cercanos, que en un primer momento no se percataron del desfallecimiento del cantante y siguieron actuando (ver video).
Nacido en 1949, Papa Wemba era el nombre artístico de Jules Shungu Wembadio Pene Kikumba, que comenzó a ganarse su fama cuando a los veinte años se unió a la banda congolesa Zaiko Langa Langa junto a otros reconocidos músicos de la República Democrática del Congo. Influenciados por el pop occidental de los años ’60, Zaiko Langa Langa rompió el molde de las orquestas tradicionales de rumba, quitando el protagonismo a las secciones de vientos y llevando a la guitarra eléctrica y el redoblante al frente.
En épocas de guerra civil, asesinatos e inestabilidad política, la música de Papa Wemba originó una potente mezcla de sonidos de raíz africana e influencia cubana y latinoamericana, que convirtió a Kinshasa en la capital musical del continente.
En 1977, Wemba y otros miembros de Zaiko Langa Langa crearon una nueva formación musical, Viva La Música, que les granjearía el reconocimiento mundial y el éxito en Europa, América y Asia, además de popularizarse en el resto del continente africano.
El reconocimiento global le llegó relativamente tarde en su carrera, cuando en 1995 Peter Gabriel decidió grabar con su sello Real World el disco “Emotion”, que vendió más de 100 mil copias. Para entonces, llevaba más de 35 álbumes editados.